Hace unos días encargué a una librería uruguaya un ejemplar antiguo de
«Historia de la estupidez humana» del húngaro Istvàn Rath-Vegh. El librero, muy simpático y amable, me hizo notar que la obra había pertenecido al «célebre» Wimpi y que estaba firmada por él. No tenía ni idea de quién era este buen señor, así es que me informé y resultó ser Arthur García Nuñez (1906-1956), un humorista uruguayo. Su biografía dice que se instaló de muy joven con su madre en Buenos Aires, y que estudió en el Colegio Nacional Mariano Moreno, para ingresar más tarde en la Facultad de Medicina, pero abandonó la carrera, estuvo un tiempo en el Chaco y volvió a Uruguay. Fue redactor de El Imparcial y posteriormente del diario El Plata. Sus columnas radiofónicas le dieron gran notoriedad. La prensa porteña acogió con entusiasmo sobre la mitad de la década de los 40 sus relatos costumbristas y humorísticos.
«El gusano loco» y
«Los cuentos del viejo Varela» fueron los únicos libros que publicó por decisión propia. Extremadamente autocrítico, quemó muchos de sus originales. A algunos, como un servidor, Wimpi le recuerda a aquellos humoristas como Camba o Vighi que rodeaban a Ramón Gómez de la Serna. Estas líneas son sólo para decir que me ha hecho mucha ilusión tener un libro que perteneció a Wimpi, así es que le he encargado tres más al librero uruguayo que también fueron suyos. Finalmente, unos pequeños extractos de los escritos filosóficos del buen señor Wimpi:
«El hombre actual es el más problemático de la historia. Se encuentra un poco perplejo, tanto ante lo que ocurre como ante lo que no ocurre en este mundo. No encuentra palabras en ningún idioma para definir el repertorio de crisis que le rodea. Pero mientras siga riendo, irá salvándose en buena hora».«Hay mucha gente honrada que tendría que estar presa. Son los que dan a lo que hacen el nombre de lo que deberían hacer».«Todo cuanto a otros se da en este mundo, se les da provisoriamente, porque siempre vuelve a quien lo diera, aumentado en gran modo. Si los egoístas supieran las ventajas que reporta el ser generoso, serían generosos de puro egoísmo».
8 Revelaciones:
Oiga, qué entrada más bonita
(firmo como Harry, pero da igual, como si firmo Elena Francis, que usted siempre me descubrirá). Qué zoquete soy, ay.
Oiga, Arkab, mire que es guapete el señor Narayanan ¿eh? ¿usted cree que la foto está retocado con Photohop o no?
Y con ese «bigotaso», más. Hay por ahí una ingente cantidad de escritos sobre los efectos psicosomáticos que tendrán en el futuro de los usuarios del potocho esos segundos de lectura del nombre de Narayanan en la espera.
Por aquí hasta le han dedicado una sevillana, mire:
El bigote de Narayanan
está retocao con fotochoc
El bigote de Narayanan
está retocao con fotochoc
Está retocao con fotochoc
el bigote de Narayanan
y está retocao con fotochoc
el bigote de Narayanan.
Pues el otro día escuché a Alaska diciendo que sí, que la habían retocao con fotochoc porque ella no tiene la piel verde. Amos, que da para una jota o para una sevillana, pero me da pereza el copipega ahora mismo.
Que dice la Olvido Gara
que no tie verde el pellejo
que por eso lan retocao
Con un Photoshop viejo
Y de la cintura
Y de la cintura
le ha quitao un cacho
un diseñador
un diseñador
que dicen que es gabacho
Mira que moderna
mira que moderna
mira que es la Cope
que dejan a la Alaska
ser colaboradora
con tanto descoque
Oiga, ASrab, usted que es mi faro, mi guía y mi pastor pajarero, mire mi blog a ver que es lo que tengo en casa.
Vale imaginesé que en el mensaje de antes poner Arkab
Que insólito. Estaba buscando información sobre este libro de Rath Vegh, precisamente a raíz de que Wimpi lo cita. También en los últimos días me ha llamado la atención que se están reeditando en Montevideo algunos de los libros de Wimpi, autor muy popular en su momento pero casi desconocido para las nuevas generaciones. Por curiosidad, ¿adónde fue a parar ese ejemplar en otros tiempos perteneciente al bueno de Wimpi?
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